Como ocurre en algunos textos más especializados, en los géneros propios de la divulgación médico-sanitaria se suele emplear palabras o términos sin saber exactamente qué significan.
Un buen ejemplo de ello es el empleo del verbo cursar seguido de la preposición «con» como sinónimo de padecer, sufrir o presentar. Se trata de una impropiedad en el plano léxico que ha calado profundamente entre los redactores y los propios especialistas.
Cursar significa «desarrollarse o seguir su curso una enfermedad», junto a un complemento regido por la preposición «con» o «sin». Sin embargo, encontramos numerosos ejemplos, y no solo en los textos destinados a los pacientes, sino también en los dirigidos a los profesionales de la salud, en los que cursar con se emplea, como decía antes, como sinónimo de padecer, sufrir, tener, presentar. Y para muestra, un botón, o mejor tres:
2. Los pacientes obesos, en su gran mayoría cursan con Resistencia a la Insulina.
3. Usted deberá al ingresar […] informarnos si cursa con algún proceso respiratorio infeccioso […].